Hablemos de la vida cotidiana y su construcción social

El ser humano construye su realidad mediante la interacción con otras personas en un proceso de socialización donde tomamos consciencia de nuestro propio ser, de nuestra mente. Nos hacemos conscientes de que existimos, de que somos. 

 

Una vez somos conscientes de esto, intentamos representarnos por medio de algún modelo con el que nos sentimos identificados y mostrar a los demás aquello que queremos que nos vean, convirtiéndonos en seres sociales y racionales. Pero este proceso está sumamente condicionado por las estructuras sociales, políticas y económicas, es importante para estas que las personas nos identifiquemos con una ideología concreta y poder reproducir aquello que la cultura dominante cree necesario.

 

Tenemos el poder para cambiar esta situación, de capacitarnos para asumir nuestras responsabilidades como participantes de la sociedad y liberarnos de coacción para que podamos elegir libremente.  De esta  manera podemos asumir una ideología más coherente y humanizada.

 

Por otra parte, en los últimos años han experimentado un gran aumento las técnicas de tratamiento estético y de belleza. La imagen, es un producto social que se está convirtiendo en unos de los sectores mejor cotizados, con lo cual quiere decir que cada vez más la gente busca una satisfacción personal a través de su estética, nada es más importante que verse guapos, delgados y sin celulitis. Este proceso de transformación del cuerpo humano está generando a su vez nuevos significados sociales.  

 

Hay muchas versiones sobre estos tratamientos y sobre los productos farmacéuticos que se están creando a su alrededor, que aunque puedan estar controlados genera dependencia y están transformando el concepto de belleza.